Machado

"Caminante, son tus huellas el camino y nada más; Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace el camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Caminante no hay camino sino estelas en la mar". Machado.

sábado, 26 de noviembre de 2011

PUIG CAMPANA (1.408 metros)

LA MONTAÑA MÁGICA DE LA MARINA


FICHA TÉCNICA-
Día: 26 de noviembre 2011
Integrantes: Carolina, Vicente, Patro y Julián.
Tiempo: 5 horas y 23 minutos (2-48 de subida).
Dificultad: Alta

ITINERARIO-
Font del Molí - Puente- Cruce PR - CV 12 y 13 - Canal del Barranc del Port- Bancal del Moro- Cima del Puig Campana (1.408 metros)- Bancal del Moro- Pouet Puig Campana- Font de la Solsida - La Cova del Cremat - Refugi del Pastor - Foia Cac - Barranc del Port - Font del Molí

Hicimos la subida “clásica”, por la pedrera. El regreso lo hicimos por la cara este de la montaña,  rodeando el monte.

Font del Molí.
El Carreró, al fondo
RUTA-
Llegamos a Finestrat procedentes de Villajoyosa y dejamos el coche en la Font del Molí. Empezamos a andar por un camino asfaltado que está señalado con marcas amarillas y blancas hasta que cruzarnos un pequeño puente. En ese momento se separan tres senderos: el que sube a la cima del Puig Campana, el que lo bordea, y el que lleva a Polop, que sigue por camino asfaltado. Nosotros tomamos el primero. Superamos unos montículos y un par de subidas suaves hasta llegar a un llano, lugar perfecto para recoger fuerzas, necesarias para la fuerte subida que nos espera.
Cuevas en la subida.
En el canal.
En el canal.
Desde la senda podemos observar algunas de las vías de escalada más famosas de la provincia de Alicante, así como las pequeñas sendas que conducen a ellas. Tratamos de ver si hay algún escalador en la pared, pero no apreciamos que exista ninguno en plena faena. Sí vemos a bastante gente que sigue nuestra ruta hacia la cima, por el Barranc del Port. Continuamos andando por la senda y, llegados al límite del pedregal donde desaparecen las señales. Empezamos realmente la subida por él, haciendo zig-zag para tratar de suavizar la dureza del sendero. Existen varias caminos de subida, pero tratamos de avanzar por los que existen al lado derecho de la torrentera, canal de subida también denominado Carreró, una inestable pedrera con las piedras movedizas.
La senda es muy empinada y difícil, aunque está más limpia que otras veces porque recientemente se ha realizado una prueba atlética. Carolina, que debuta en la subida, piensa en un principio que han exagerado los que le han dicho que es duro y exigente el trazado, pero, más tarde, a medida que nos acercamos al collado, va cambiando de opinión.
Patro, ascendiendo.
A pesar de ello sube de forma perfecta, regulando como una campeona.
Antes de llegar al collado que separa las dos cimas nos vamos hacia la derecha. A la izquierda admiramos el majestuoso Tajo o Cuchilla de Roldan, que forma una colosal hendidura en la crecería de la montaña. El  “tajo de Roldán” parecido a la famosa Brecha de Rolando que separa Francia de España cerca del Monte Perdido, lo hizo, según cuenta una leyenda, el caballero Roldan en una de sus epopeyas por estas tierras contra los musulmanes cuando golpeó con su espada y un gran trozo de roca cayó al mar en lo que hoy sería la isla de Benidorm.
Siguiendo unas marcas verdes llegamos a la cima en 2 horas y 48 minutos. Está llena de gente y entre todos ellos destacan tres chavales de Torrellano que reconocen ser del Hércules y aventuran que al día siguiente el equipo alicantino va a ganar el derbi al Elche (Como montañeros tienen mucho mérito, pero como adivinos mejor no hablar. El equipo franjiverde ganó en el Rico Pérez 1-2).
Carolina, Julián, Vicente y Patro en la cima.
Desde la cima se abre el panorama a las montañas de Aitana, Ponoch, Aixorta y Bernia, y sobre Finestrat, Villajoyosa, Altea y Benidorm al mar. Algo difícil de igualar. Para aprovechar semejantes panorámicas comemos arriba y como postre un bizcocho de zanahoria que nos ha cocinado Mari. ¡¡¡Impresionante!!!
Benidorm y su isla vistas desde la cima del Puig Campana.
Vista desde la cima.
Una vez disfrutado de esta visión panorámica regresamos hasta el collado del que antes hemos hablado y tomamos el "Sender botanic de L'Ombria del Puig Campana". Primero la senda desciende hacia la derecha en forma de serpenteante y después en zig zag. Es más cómoda y agradable que la desde la Font del Moli, aunque está bastante estropeada por las lluvias caídas en los últimos días. En la bajada toma el mando Carolina, pero en un momento pierde la senda y casi nos "tira" por un barranco. Regresamos al buen camino, mientras un grupo de chavales están subiendo. Un poco antes de llegar al camino nos desviamos unos metros para ver el Pouet del Puig Campana que tiene un árbol de color amarillo dentro de él.
Pouet Puig Campana
Font de la Solsida.
Regresamos de nuevo a la senda y cuando ésta se convierte en camino nos vamos hacia la derecha en dirección a la Font de la Solsida. Tiene poca agua, pero en la roca existe una hiedra espectacular.

Hiedra junto a la Font de Solsida.
Atravesamos una zona de pinos arrasados en el incendio que hubo hace unos años. Parece un auténtico cementerio. Lugares como este dejan al descubierto la fragilidad de la montaña. Es muy fácil pegarle fuego, pero recuperarla cuesta muchos años.
Nuestra senda continúa en dirección sur hacia una zona de rocas denominada Penyò del Lledoner, que dejamos a nuestra derecha. Un poco más adelante pasamos junto a la Cova del Cremat. A partir de ahí el descenso llega en pronunciada pendiente. Dejando un sendero a nuestra izquierda y tras pasar por unas ruinas llegamos a la Foia del Cac, donde vemos un cruce señalizado.
Pinos quemados en un incendio.
Dándole la vuelta a la montaña.
En este lugar y escasos metros apreciamos un montón de bancales y el refugio del tío Flare. Continuamos en descenso rápido hasta llegar muy cerca del alto de Realet. Pasamos por su pequeño collado hasta alcanzar una pista que se dirige a Sella, que seguimos hasta cruzar el Barranc del Port y a la zona de chalets.
Giramos hacia la izquierda por la carretera y cuando encontramos un pino muy grande nos vamos a la derecha por una senda hasta llegar a la Font del Molí. Nos aseamos un poco en ella y, a continuación, nos tomamos unas cervezas en el restaurante Font del Molí. Las aceitunas que nos sacan están buenísimas. El secreto, según el camarero, está en el agua de la fuente, sin clorar.

sábado, 19 de noviembre de 2011

LA SAFOR (1.013 metros)

LA NIEBLA COMO PROTAGONISTA

Día: 19 de noviembre
Integrantes: Pepe, Vicente, Patro, Lourdes y Julián.
Tiempo: 7 horas y 25 minutos.
Distancia: 21 kilómetros.

El monte Safor o Azafor es un relieve  situado en los sistemas Prebéticos, que se prolongan por el mar Mediterráneo hasta las islas Baleares, se encuentra situado en el sureste de la provincia de Valencia y limitando con el norte de  Alicante. Forma parte de la Sierra de Ador. Es paralela al río Serpis, y divide las aguas de los ríos Vernisa y Serpis. En esta sierra se separa el macizo de La Safor, su cima tiene una altitud de 1.013 metros sobre el nivel del mar y se extiende de oeste a este hasta la Huerta de Gandía, y en la otra sierra se eleva hasta la cota 680 metros en la montaña de la Cuta.  El nombre original de La Safor es de origen árabe y significa «campo de repasto y hartura».

ITINERARIO: 
L'Orxa - Piscinas Municipales - Sendero Barranco Gorigori - Cueva del Gorigori - Área recreativa y Font de Bassiets - Área recreativa de Font d'Olbits - Nevero de La Safor- Cima de la Safor- Finestra-Casa de Tarsan- Barranco de la Parra - Vía Verde del Serpis - Fábrica de la Llum - Estación de l'Orxa - Puente sobre el río Serpis - Jardines de entrada a l'Orxa - Ctra. CV 701 - l'Orxa.

RUTA:
En coche llegamos desde Muro, pasando por  Beniarrés hasta L´Orxa .
El día está encapotado, las previsiones de lluvia son muy bajas, pero por si acaso llevaremos los chubasquereos. Iniciamos la caminata al principio del pueblo, llegando hasta la piscina municipal de la citada población alicantina, lugar donde se encuentra el panel de inicio del PRV 207. En ese punto divisamos una pista forestal que toma dirección Este, la que seguiremos con el propósito de aproximarnos a la fuente de "Bassiets", primer punto de nuestro recorrido.
Después de un trayecto inicial aproximado por la pista forestal de unos 400 metros vemos a nuestra izquierda y en el fondo del barranco la pared de una presa artificial, la que tiene la función de frenar las aguas en épocas de fuertes lluvias. En este punto abandonamos la pista forestal, y nos situamos en lo alto de la propia presa para descender rápidamente por el margen derecho de la misma hasta el fondo del barranco. Avanzamos por el lecho del río, durante unos 400 metros, hasta localizar a nuestra derecha una senda, la cual nos permite salir del cauce y encaminarnos a una zona de cultivos. Seguimos el trazado del sendero que nos conduce de nuevo al cauce del río pero esta vez solamente lo cruzaremos. Poco a poco vamos viendo al fondo a la izquierda  la "Cova del Gorigori" claramente identificable por sus grandes dimensiones. Una vez cruzado de nuevo el cauce del río encontramos a nuestra izquierda, nuevamente y bien marcado el trazado de la senda la que seguiremos en busca de la citada cueva del "Gorigori". Una vez en ella realizamos unas fotos, aunque sin parar mucho ya que es utilizada como "sester" o corral de ovejas y cabras y el olor no es muy agradable. Volvemos al camino, el trazado de la senda es claro y sin problemas, avanzamos dejando a nuestra derecha un barranco donde crecen arboles de hoja perenne que dejan su tonos amarillo-ocre en la ladera, romeros y tomillos florecidos, margaritas vestidas de primavera. No hay ambiente invernal. 
Seguimos hasta localizar mucho mas arriba una pista forestal, la cual, está hormigonada en las pendientes más fuertes.
Una vez en la pista forestal, seguiremos hacia la derecha y en sentido descendente, para seguir después de unos metros de bajada con una fuerte subida. Iniciada la subida y justo antes de la primera curva que presenta la pista, localizamos a nuestra izquierda el sendero que mas tarde nos tiene que conducir hasta la "Font dels Olbits". Desestimamos momentáneamente la senda y seguimos por la pista forestal unos 400 metros mas, llegando a la zona de la "font dels Bassiets", fácil de reconocer por la instalación del área recreativa, con chopos que han perdido ya las hojas. En el área recreativa contamos con agua potable no tratada, estando debidamente indicado en los carteles informativos. En ella encontramos a una persona almorzando. Se ha encendido el fuego para asarse algunas chuletas, embutidos y otros manjares que nos hacen abrir el apetito, no se digna ni en saludarnos, debemos tener cara de hambre.... o de pocos amigos.
Retrocederemos por la misma pista forestal por donde hemos accedido al área recreativa, buscando el cruce de senda que a la subida hacia "Bassiets" habíamos desestimado a nuestra izquierda y que ahora, en la bajada la localizamos a nuestra derecha. Una vez en la cabecera de la senda, empezaremos su trazado con un corto descenso, buscando el fondo del barranco, (desde este punto divisamos dirección norte y en lo alto el área recreativa de "Olbits", siendo bastante significativa debido a la existencia en el lugar de un pequeño grupo de árboles) después del descenso transitaremos unos 450 metros por el lecho del río, localizando después de esta distancia y a nuestra derecha el sendero que seguiremos sin posibilidad de duda. Nos encontramos con un madroño con frutos maduros y comemos alguno de ellos, están en su punto.
Pasamos por una zona llana conocida con el nombre de la "Pedra Plana", y al final de la misma el sendero efectúa un giro bastante brusco y empieza con la subida hacia la font dels Olbits, la que localizaremos al final de la misma, no siendo visible el área recreativa hasta estar cerca de ella, la cual identificamos sin ningún tipo de duda porque ya hemos pasado otras veces por aquí. En el área recreativa, contamos con agua potable no tratada, estando debidamente indicado en los carteles informativos. Paramos un poco y tomamos un par de barritas energéticas. Desde allí vemos que la niebla nos espera en la cima.
Desde la fuente subimos los escalones y junto a una mesa tomamos el sendero por la derecha, muy bien marcado, que nos llevará a la cima. A medida que nos vamos acercando a ella la niebla se hace mas espesa y en la Plana de la Cova Negra, antes de llegar a la cava, la visibilidad casi es nula, nos adentramos entre carrascas con aspecto fantasmal. La Nevera de La Safor, entre la bruma,  nos espera con su entorno muy verde, con enormes hiedras que crecen  en sus paredes.  Junto a ella, ya en la provincia de Valencia, hay un poste que nos indica la senda hasta la cima, a 1.013 metros.
Desde arriba la visión del Montcabrer  y el Benicadell suele ser preciosa, pero en esta ocasión la niebla nos dificulta mucho la panorámica de las cimas colindantes, aunque de vez en cuando quiere romper el sol en el cielo, a ratos se puede apreciar el embalse de Beniarres y el pueblo, pero no las cimas de las montañas cercanas. Tras hacer cumbre decidimos comer al lado del punto geodésico. La temperatura es agradable y además de degustar distintas viandas catamos un Barón de Lajoyosa, un Gran Reserva de Cariñena, bravo donde los haya (más bien bruto).
Bajamos hasta el nevero. A unos metros hay un mirador en el que habitualmente se puede apreciar todo el circo de La Safor, pero en esta ocasión ni nos acercamos porque la niebla en esa zona es mucho más espesa y no deja ver nada.
Cogemos desde el mismo nevero, en dirección norte, un sendero que se hace hueco entre arbustos y pequeñas charas. Enseguida se comienza la bajada. Hay mucha piedra y humedad y hay que bajar con cuidado. Pronto llegamos a la Finestra, una ventana realizada sobre la roca. Se ve entre tinieblas, igual que el resto del circo. Sin embargo, mirando de frente hacia el mar se puede comprobar que el dìa se va abriendo por aquella zona. Continuamos el descenso, con cuidado, hasta llegar al camino de L`Orxa. Una vez en él giramos hacia la derecha y por un camino asfaltado llegamos a la casa denominada Tarsan.
Seguimos por la izquierda hasta llegar a la Casa de L`Isidret, refugio de montaña. Continuamos nuestra ruta, bien señalizada con marcar blancas y amarillas, hasta llegar a un letrero que nos indica la entrada a un sendero que nos introduce en el Barranco de la Parra.
En el descenso nos encontramos con una cascada, con poca agua, apenas unas gotas resbalan por la pared cubierta de musgo, que llega de la Fuente de la Mata.
Nuestro sendero llega a la pista que une Villalonga y L`Orxa, con el rio Serpis como testigo. Seguimos por la izquierda por la ruta que realizaba en su dìa el ferrocarril denominado Txitxarra (tren de los ingleses en el siglo XIX), que unía Alcoy con Gandía. Atravesamos un túnel, pasamos por la antigua estación del Garrofers antes de llegar a una central elèctrica o Molino usado como fábrica de luz. Estamos en la zona denominada el Raco del Duc. Atravesamos un puente y posteriormente un nuevo túnel antes de llegar a una bonita cascada. Vemos varias garzas volando sobre el río Serpis.
Nos tropezamos con el cartel de fuente de Boteros, a mano izquierda,  vamos a visitarla, surge mucha agua de la pared y tienen un aljibe de un color azul-turquesa limpisimo, está recien rehabilitado con  barandillas. Reemprendemos la marcha, llaneando, y cuando ya tenemos a la vista el castillo, antiguo feudo del caudillo Al-Azraq (La fortaleza de origen mulsumán , que está fechada en los siglos XII y XIII, fue transformada a principios de la época cristiana en un castillo señorial desde donde se dominaba la vall de Perputxent, existe un desvìo a la izquierda que nos lleva entre huertas de olivos, almendros...hasta la carretera. Tras pasar el puente llegamos a Lorcha. Principio y fin de esta espectacular excursión.



viernes, 11 de noviembre de 2011

SERRA DE FREDES Y PARQUE NATURAL DE ELS PORTS

-LA TINENÇA DE BENIFASSÀ (CASTELLÓN)-


  • CIRCULAR FREDES-EMBALSE DE LA ULLDECONA-FREDES

Día: 11/11/2011
Participantes: Vicente, Patro, Julián y Lourdes
Tiempo: 5 horas y 31minutos.
Kilómetros estimados: 17.

Ruta:
Partimos de Elche dirección a Fredes a las 6 de la mañana, hay que llegar a Vinaroz y desde allí dirección a San Rafael, La Senia, el Embalse la Ulldecona y Fredes. El viaje es largo, unas 4 horas.
Desde el pequeño pueblecito de Fredes, situado a 1090 m,  nos dirigimos a buscar  el PRV 75.1. Salimos por debajo de la iglesia hacia unas huertas, donde comienza también el GR 7 y por una senda mullida llegamos a una trifurcación de caminos. Tomamos el de la derecha que indica La Senia, con dirección al Portell del Infern. Pasamos la font del Teix y seguimos en dirección recta entre pinos silvestres, boj, cojines de monja... El camino es precioso y muy bien señalizado, así que entre el GPS y las indicaciones llegamos a un  punto alto en el recorrido donde las vistas a las diferentes molas que nos rodean son espectaculares. Un escenario increíble en forma de barrancos, cantiles, farallones rocosos y bosques.
El sendero comienza a descender, a la derecha vemos el Mas del Pixón, en ruinas, situado en una era con unas vistas privilegiadas a toda la cordillera de Els Ports. Como llevamos muy buena hora desestimamos el desvío que nos conduce al Salt de Robert y lo dejamos para la vuelta. Hacemos el recorrido más largo.
Llegamos entre un paisaje de vértigo y entre impresionantes cantiles al indescriptible paisaje del Portell d'Infern, una puerta de piedra que da entrada a unos farallones rocosos extraplomados que parece que van a caer sobre nuestras cabezas. Si han estado allí siglos esperemos que aguanten diez minutos más.
Atravesamos la zona impresionados con el rincón tan maravilloso, si el infierno es así ¿como será el cielo?
Comenzamos el descenso entre pinos laricios de gran envergadura, al fondo observamos también una peña foradada con un gran arco natural. Continuamos nuestro caminar, hacia abajo hasta ver al fondo el embalse de la Ulldecona muy mermado por las escasas lluvias que tanto daño causan por toda España.
 Entre curva y curva  llegamos al Estrecho de la Mola y en cómodo descenso dejamos el Mas de Cipriano. Nos situamos en la cola del embalse que está sin agua y accedemos a la zona del Mangraners
Llegados a este punto está el  Mas Joan, también abandonado. A continuación aparece una pista y giramos a la izquierda. Enseguida nos tropezamos con el Mas de Ximo, en uso, con un jardín muy cuidado. Es una pista muy ancha, avanzamos rápidamente.
Observamos una antigua noria a un lado del cauce del río y por la ribera izquierda de dicho cauce ascendemos entre algún chopo, carrascas y pinos. 
En aproximadamente medio kilómetro cruzamos un puente y seguimos nuestro paso buscando donde comer, dejamos a la derecha la Font de la Fou  completamente seca y llegamos a una curva donde hay otro puente que volvemos a cruzar y paramos a comer.
Reponemos fuerzas y encontramos una bifurcación que cogemos a la izquierda hacia el Barranco del Salt, nuestro siguiente objetivo. Avanzamos  rodeados de moles rocosas que sobrecogen, parecen templos de Asia con paredes ennegrecidas y talladas con el paso de los miles de años.
La vegetación ensalza el paisaje. Admirando el entorno y esperando llevarlo todo dentro de nuestras cámaras llegamos hasta una zona recreativa. Es la casa forestal de la Tenalla, la cual dejamos a la derecha.
En esta zona más sombría se nota más el otoño, abundan los arces, ya casi sin hojas pero han sembrado el suelo de amarillos y ocres, encontramos algún ejemplar de setas, y el musgo y los líquenes se apoderan de este rincón que tiene varios carteles de microreserva de flora.
Continuamos el camino que va vadeando el barranco, vamos acompañados de  formaciones calizas que parecen torreones, el camino se transforma en senda que va por el lecho rocoso del Salt y empieza a tomar altura, al tiempo que vemos la senda que venía de el Portell d'Infern a mano izquierda y una senda que va al Mas de Peraire a mano derecha.
El sendero se angosta entre la vegetación y se inclina, pero en poco tiempo llegamos al Salt de Robert. Apenas  se escurren  unas gotas de la pared de la derecha, de unos 20 metros,  se ve a media altura una faja, al estilo pirinaico, por donde huyen varias cabras montesas preciosas, haciendo malabarismos en las alturas. Dicen que cuando cae agua se puede acceder a la cascada colocandose por la parte de  atrás, sin mojarse.
Sacamos unas fotos y continuamos el ascenso, casi emboscados entre la densa maleza y arbolado, el suelo está un poco peligroso, esta mojado y las innumerables raíces y piedras resbalan un poco, es mejor ruta para subir o ....para bajar demasiado rápido.
La pendiente crece mientras pasamos por centenarios arces que tiñen de colorido el otoño. Vemos también acebos, mucho boj y poco a poco hojas diferentes de avellanos. Con razón, llegamos al Racó del Avellanar,  donde el bosque se aclara. Nos extasiamos con el paisaje que vamos dejando a nuestros pies. Pasamos por la llamada Canaleta de Mauro: Aunque la senda a veces parece que va a perderse y marca varias trazas, es muy fácil seguirla entre la vegetación por el margen derecho del barranco, hasta la salida al camino forestal. Apenas son las cuatro de la tarde pero la niebla que iba por las cumbres, circulando de un lado a otro va poco a poco cubriendo el paisaje.
Seguimos el camino hasta alcanzar la trifurcación de la mañana, en dirección a la derecha ya vemos el pueblo a nuestro alcance.
Bonita excursión para estirar las piernas y para prepararnos para la larga ruta de mañana. Nos alojamos encima del bar de Fredes, llamado La Taberna, en un bonito apartamento y cenamos abajo en el bar, muy bien, casi demasiado. Allí se reunen los pocos vecinos que tiene el pueblo, una señora nacida en Orihuela, más concretamente en el Rincón de Bonanza, pero que a los 20 emigró a Tarragona; un matrimonio que vive en Villanueva de la Geltrú y el hombre se presta a acompañarnos a ver el Faig Pare. Mañana será otro maravilloso día. A las diez y media a descansar.

-DOS HAYEDOS EN EL PARQUE NATURAL DE ELS PORTS (TARRAGONA)-


  • FREDES-REFUGIO DE LA FONT FERRERA-BARRANCO DELS CIRERS-FAIG PARE-PI GROS-FONT DEL RETAULE-MAS DE VALLCONERA-REFUGIO DE LA FONT FERRERA

Día: 12/10/2011
Participantes: Vicente, Patro, Julián, Lourdes, Miguel y Otto (El perro de Miguel).
Tiempo: 8 horas y media
Kilómetros estimados: 27.



Ruta:
A las 6 de la mañana canta la gallina, del despertador de Patro. Un buen desayuno con tostadas y café y a las 7 en punto salimos de la plaza mayor de Fredes entre penumbras, la niebla se ha apoderado del pueblo y todavía no ha salido el sol. Tenemos suerte porque Miguel conoce la ruta hasta el refugio de Font de la Ferrera.El comienzo de la ruta no tiene complicación, solo hay que seguir el GR-7 que sale del pueblo de Fredes dirección al Refugio y al pinar Pla. Salimos del pueblo por un sendero mulero precioso, entre sus campos de cultivo salpicados de majestuosas encinas. Poco a poco nos iremos internando en el bosque e irá aumentando la frondosidad del mismo, los bojes se van haciendo abundantes, junto con los pinos, encinas, acebos, arces...forman un entorno idílico por donde transcurre el GR-7. Abandonamos este camino señalizado tomando un atajo que conoce Miguel, sale a la derecha, que a pesar de la neblina y de la poca claridad que hay con los primeros albores del día nos parece espectacular. Nos acercamos por encima del barrranco que ayer recorrimos para llegar hasta el Salt de Robert. A la derecha dejamos el Mas del Peraire y nos encaminamos hacia el Refugio, salimos a una pista y pasamos al lado de un aljibe, que sirve para la extinción de incendios y también para abrevadero de pájaros que creemos de gran tamaño, por los excrementos que hay en las orillas. 
Acebo


Font del Retaule

Caminamos unos 300 metros de pista, para luego coger otro sendero y en menos de 2 horas llegamos al Refugio de la Font de la Ferrera. Parada para dejar los sacos de dormir en la zona de refugio no guardado, una barrita y en marcha.
A partir de aquí las señales se indican con una estrella azul: es el sendero llamado "Estels del Sud", "las Estrellas del Sur". Al salir del refugio encontramos una pista que tomamos en dirección a la izquierda, en el borde hay un coche aparcado con "seteros" almorzando. Nos dicen que no salen por la falta de lluvias. Nosotros seguimos hasta encontrar una senda a la derecha que se interna en el monte, entre acebos con frutos rojos, pinos, carrascas, bojes.. y la niebla que todavía no levanta. La zona se conserva muy sombría pero con una temperatura para ir en camiseta, increìble en noviembre.
Pasamos la Font del Bassiol con la forma típica de construcción, un tronco vaciado para depositar el agua y unos maderos que guien el agua hasta el deposito, pero está sin agua.
Llegamos de nuevo a la pista, cruzando unas vallas de madera.  En este momento hay un raso y enseguida atravesamos una puerta verde con cancela, pero se pasa sin problemas. Vamos rectos, dejamos a la izquierda el Pozo de Delme y casi en paralelo vemos un par de piedras a nuestra diestra que nos llevan al Mas del Sargent, está en ruinas, Miguel nos cuenta que querían rehabilitarla pero no tenían permisos por ser un parque natural.  Si hubiesemos seguido la pista tambíen se puede llegar al hayedo del Retaule, de hecho volveremos luego por él.
Desde el Mas del Sargent, el GPS que controla Vicente con profesionalidad, con los datos que le dió Pepe (del que nos acordamos todo el fin de semana, le hubiera encantado pero el trabajo no le ha permitido venir. Su aportación ha sido "de categoría".) Nos internamos en una senda escondida, tenemos que avanzar apartando los bojes que casi han borrado este sendero, no hay ni hitos, ni marcas, entre la maleza y las huellas de animales, sino por el GPS no podriamos adentrarnos en este bosque tan tupido.
 Llegamos a la Cova Trobada, esta cerrada con una verja verde a nuestra derecha, nos cuenta Miguel que el pastor de Fredes se adentró una vez y le habia encantado, primero hay que bajar unos 7 metros y después te internas en una cueva con estalagmitas y estalactitas milenarias. Los pastores la cerraron porque los animales caían en ella. Continuamos hasta alcanzar el alto, nos situamos encima de una mola inmensa y allí entre dudas la labor del GPS es fantástica.
Bajamos rodeados de arces, hayas, bojes, avellanos, encinas...hasta llegar a la Font del Cirers, en una de las paredes del farallón rocoso hay una antigua puerta y a su lado hay colgada una vieja sartén y dentro una estufa ( nos cuenta en el refugio que después de la guerra civil fue utilizado por los maquis) Un recodo recóndito y casi salvaje que no se puede uno perder si se acerca por aquí.  
Desde allí salimos a una llanada con encinas, donde hay algun vallado para proteger la producción de trufas de los lugareños y después de un pequeño trecho por sendero nos unimos a la pista que hemos dejado antes de tomar en dirección  al Mas del Sargent.
En la pista, hacia la derecha, vamos avanzando rápidamente, entre curva y curva, rodeados de encinas y pinos. Es un recorrido más bien llano, pero con bastantes kilometros. En una bifurcación hay unas personas a las que preguntamos y nos dicen que queda una hora. Vamos a la izquierda. En este momento la cuesta se pica y el ritmo disminuye un poco, vamos un poco cansados, pero sobretodo hambrientos.   
Grupo al completo en el Faig Pare


En diez minutos llegamos al rincón donde se encuentra a la derecha, la Font del Retaule, formada con varios troncos de madera vaciados por donde corre el agua. Dudamos si comer aquí o no, pero decidimos que nuestra meta está en el HAYA, volvemos a la pista y en un último esfuerzo vemos ya unos ejemplares de hayas, algunas con hojas, con su porte tan elegante, sus ramas retorcidas, espectaculares. Realizando fotos y encantados continuamos ascendiendo por el Barranco del Retaule hasta llegar al Faig Pare. Hay que verlo "in situ" para conocer su exacta dimensión. Por muchas fotos que veas no se puede imaginar, está situado en una cuesta y sus raices sobresalen más que veinte personas. Su tronco es inmenso, lástima no haber venido un par de semanas antes, pero volveremos para verlo alguna primavera o en otoño con toda la hoja.
Un merecido almuerzo, incluyendo vino y té, una última contemplación y hacia abajo. Vamos a visitar el Pi Gros. Así que descendemos el barranco contemplando las hayas desnudas y los barrancos y molas que nos rodean y nos vamos a mano izquierda a ver la Font del Retaule y desde allí a mano izquierda hacia el pino, en cinco minutos hay una bifurcación hacia la izquierda, en ascenso. Hay que tener cuidado porque no está señalizada, pero Miguel se acuerda y subimos en cinco minutos a ver el inmenso Pi Gros. Es impresionante, se encuentra en una cuesta y desde abajo se ve imponente, sus ramas tienen el tamaño de muchos pinos ya adultos. Lo contemplamos tranquilamente, lo rodeamos entre 4 y descendemos despacio que las raíces están un poco resbaladizas.
Podíamos haber regresado más despacio pero Miguel no hace noche en el refugio así que tiene un par de horas añadidas a nuestra extensa excursión. Lourdes arenga a la tropa en todo momento y contemplando  las montañas que nos rodean vamos ascendiendo. En vez de ir al recodo de la Font del Cirers subimos rectos por la pista. Miguel se queja un poco de la rodilla y creemos que será mejor terreno para él.
Así que obviamos el cruce del sendero que nos llevaría al sorprendente rincón del Barranco dels Cirers y  seguimos la pista en dirección ascendente. Entre curvas, pasamos al lado del Mas de les Vallcaneres donde hay unos caballos pastando en sus laderas y sin prisa pero sin pausa nos acercamos al raso donde se encuentra la Font del Faig y volvemos a cruzar la verja verde para situarnos en una zona con un aparcamiento de coches, donde hay uno pero no se ve a nadie. Pensamos en la posibilidad de si vemos gente pedir que bajen a Miguel que va un poco maltrecho, pero no divisamos a nadie y pensamos que sino llamaremos del refugio o pediremos al guardador que nos ayude y lo baje en coche. Desde aquí surge a la izquierda la senda que habiamos atravesado a la mañana, es bastante llana, asi que avanzamos con rapidez. Llegando a la pista de nuevo, Miguel sigue quejándose, pero seguimos ya enfilado hacia  el Refugio.
Oimos el motor de un coche y nos ponemos delante. Va a Fredes, al malherido Miguel se le ilumina la cara, nos dice que le puede bajar, así que ya mas aliviados vemos como se coloca en el coche y sube a su perro Otto. Menos mal.
Nosotros nos despedimos de él hasta el dia siguiente y reemprendemos nuestra marcha hasta el Refugio de la Font de Ferrera, en muy poco tiempo y entre niebla llegamos los primeros a nuestra meta.
En el refugio esa noche somos 19 y el guardés Guti o Gabriel . La gente va llegando en grupos de cinco,  progresivamente. Nosotros les recibimos ya duchados y limpios comiendo unos cacahuetes y tomando unas cervezas.
El día ha sido perfecto y la cena es un buen colofón para recuperarse del desgaste de la caminata. Entre risas y algunos bostezos se hacen las diez y a la litera. De las 4 zonas con hayedos: Barranco dels Cirers,  Retaule, Hayedos de Serrassoles y Faixes Tancades hemos recorrido dos, asi que tenemos un buen motivo para volver a esta maravilla de bosque.

-ENTRE CASTELLÓN-TARRAGONA-TERUEL-


  • REFUGIO DE LA FONT FERRERA-PINAR PLA- MAS DEL RIC DE FREDES- TOSSAL DELS TRES REIS-COLLS DELS TOMBARS-FREDES

Día: 13/11/2011
Participantes: Vicente, Patro, Julián y Lourdes
Tiempo: 3 horas
Kilómetros estimados: 9 km.

Ruta:
Partimos del Refugio de la Font Ferrera, pasamos por el Pinar Pla, hasta llegar al Mas de Ric de Fredes. Tomamos un cuerta fuegos y subimos al Tossal dels Tres Reis (1.351 metros). Bajamos a Fredes pasando por el Colls dels Tombars.

Ruta:
Salimos a las 8 y seis minutos de la mañana desde el Refugio de la Font de Ferrera. Esos seis minutos de regalo han sido una deferencia de nuestra "capitana" Lourdes, que es la que impone su disciplina en el grupo. El día anterior nos portamos bien y ha soltado un poco la mano. Tras despedirnos de "Guti" y hacernos una foto con él iniciamos la ruta por la izquierda tomando el GR7. Hace un poco más frío que en días anteriores y algo de viento. La niebla es protagonista, pero esto es lo habitual por las mañanas y por las tardes a partir de las 4. Pronto llegamos al Coll de Marado (1.251 metros) por una senda muy bien habilitada y antes de llegar al Pinar Pla dejamos a nuestra izquierda la Mas de Ventura.
Un grupo de buscadores de setas están con sus cestas por el citado pinar, medio escondidos. Llegamos a un cruce de caminos y nos dirigimos a la derecha en dirección al Mas del Ric de Fredes. En vez de seguir el camino en dirección a Sant Miquel d´Espinalva, hace un giro de 180 grados hacia la izquierda y por un cortafuegos comenzamos la subida hacia el Tossal Dels Tres Reis (1.356). Existe una pequeña senda con hitos que te indican el ascenso hacia el macizo de rocas calcáreas de formación muy abrupta.


En la cima nos encontramos con un par de cazadores que suben con su 4 x 4. Uno nos saca unas fotos y nos dice que hay batida para cazar jabalies. Hemos visto una indicación abajo y creemos que nos hemos alejado de ellos, con sus escopetas nos dan respeto.
 

El Tossal del Rey (tossal del Rei o tossal dels Tres Reis en catalán), es una cima de 1.356 metros de altura, donde confluyen las tres Comunidades que antiguamente constituían la Corona de Aragón, esto es: Aragón por el norte, Cataluña por el este, y la Comunidad Valenciana por el sur. Existe un cartel que así lo corrobora. Situada en el seno del macizo montañoso de los Puertos de Tortosa-Beceite, el Tosal colinda con los municipios de Valderrobles en la provincia de Teruel, La Cenia en la de Tarragona y Puebla de Benifasar, en la de Castellón (concretamente en el Parque Natural de la Tinença de Beniffassà). Además del punto geodésico, hay un belén pequeño  y unas indicaciones que nos dejan claro que estamos pisando hasta tres comunidades autónomas. (Aragón, Cataluña y Comunidad Valenciana.)
Nos hacemos las fotos entre la niebla y comenzamos la bajada por un camino que existe por detrás de la cima. Dicho recorrido no tiene perdida hasta llegar al Coll de Tombadors (1.231) donde atravesamos una pista que baja a Fredes y seguimos de frente por una senda.
Pasamos al lado del Coll de Cantaperdius (1.248 m.) y siguiendo los hitos aparecemos por detrás de Fredes. Apenas tres horas de recorrido. Regresamos al restaurante La Taberna, donde nos cambiamos y dejamos nuestros correos electrónicos a la dueña del bar para que se los facilite a Miguel. Habíamos quedado con él, pero no apareció. 
Coge mos el coche, pero antes de abandonar la zona visitamos por fuera el Monasterio de Santa María de Benifassà. Se trata de un recinto religioso reservado a las monjas de clausura que sólo se abre al público los jueves de 13 a 15 horas. Fue fundado en el año 1233 por el rey Jaime I, quien tan sólo hacía cinco años que había conquistado la ciudad de Valencia y creado el reino cristiano de Valencia. Los monjes Bernardos llegaron en el año 1234 procedentes del Real Monasterio de Santa María de Poblet, pero los edificios no estuvieron concluidos hasta 1250. Nos cuentan los historiadores que, a pesar de lo alejado de su emplazamiento, el Monasterio de Benifassà ejerció un importantísimo papel en el ámbito cultural. Contó con una valiosa biblioteca, así como con una botica o farmacia de gran prestigio en la que se utilizaban plantas medicinales y aromáticas que tanto abundaban en la Tinença.
Los abades que dirigían el monasterio tenían representación en las Cortes del Reino de Valencia, entre otros cargos de la iglesia, pudiendo comprobar al respecto en el Salón de Cortes del Palau de la Generalitat, que en los murales aparece pintado fray Joan Girbert, abad de Santa María de Benifassà. El monasterio fue visitado por ilustres personajes, pero en el siglo XIX se inició su decadencia, acentuada en el año 1835, cuando las leyes desamortizadoras de Mendizábal ordenaron la exclaustración de los monjes. Desaparecieron casi todas las obras de arte, aunque se conoce el paradero actual de alguna de ellas, como la tabla central del retablo del altar mayor de la iglesia del monasterio, que se atribuye a Guillem Ferrer y que representa a la Virgen de la Leche acompañada de San Bernardo, y que se exhibe actualmente en el Museo del Prado de Madrid. En el año 1931 se declaró monumento histórico-artístico nacional, pero la definitiva recuperación del monasterio se inició a partir de la adquisición del conjunto arquitectónico, en 1955, por parte de la Diputación Provincial de Castellón, que centró sus esfuerzos en la rehabilitación del Palau de l’Abat, la iglesia, el claustro, la sala capitular y el refectorio. En el año 1959, la corporación provincial cedió el uso del monasterio a una orden religiosa, para que funcionara a partir de entonces la única cartuja femenina existente en la Comunidad Valenciana. Nos quedamos con las ganas de ver esta joya y llegamos a Vinaroz, donde comemos en un restaurante del puerto antes de partir hacia Elche. Han sido tres días excepcionales, con buen tiempo, excelente compañía y disfrutando en los confines de la Comunidad Valenciana de nuestra pasión: los montes.