Machado

"Caminante, son tus huellas el camino y nada más; Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace el camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Caminante no hay camino sino estelas en la mar". Machado.

miércoles, 18 de junio de 2014

PEÑA GORDA (1.083 m.) y PEÑA LA MINA (1.053 m.)

CIRCULAR POR LA SIERRA DE ALGAYAT-


FICHA TÉCNICA-
Día: 18/06/2014
Participantes: Julián y Lourdes.
Tiempo estimado: 5 horas.
Distancia: 14 km.
Dificultad: Media-Alta.
PR CV 339. 
PR CV 399.
Como llegar:
Desde Aspe hasta Hondón de las Nieves. Al final del pueblo un cruce hacia la derecha nos conduce a La Romana. Atravesamos el pueblo hasta llegar a Algueña.
Se accede por la carretera que nos une con el Cantón de Abanilla (Murcia). Desviándonos a la izquierda por el primer camino asfaltado que nos encontramos, una vez abandonado el casco urbano, donde está situado el Caserío de la Herrada (casas de labranza), y donde veremos las primeras señales de orientación, continuamos a la derecha hasta finalizar el asfaltado donde se puede aparcar el coche.

Wikiloc: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=7109678

ITINERARIO:
Casas de la Herrada - Barranco del Fraile o de la Zarzaq - Collado de la Herrada - Peña Gorda o Penya Grossa - Crestera - Peña la Mina - Collado de la Cava o de las Mulas - L'Ombría de l'Algayat - Barranc Fort - Cantera - Coche.




La Sierra de Algayat se extiende al este de la población de Algueña, muy cerca de la frontera con la Región de Murcia. En su solana encontramos poblaciones como Hondón de los Frailes, Hondón de las Nieves, la Canalosa, Cantón (Murcia). En la vertiente norte se asienta el municipio de La Romana, y su pedanía La Umbría del Algayat. La altitud máxima de la sierra la encontramos en la Penya Grossa (Peña Gorda), con 1.083 metros de altitud, frente a los 1.053 de la Penya la Mina.
Cara sur-oeste de la sierra de Algayat.

Durante el transcurso del itinerario podremos observar la abundante y variada flora y fauna del lugar, carrascas, madroños, romeros, esparto....además de paredes muy escarpadas, con muchas oquedades, que invitan a la práctica de la escalada, rappel y del senderismo. 


RUTA:
Vemos las Casas de la Herrada y el poste indicador del PR CV 339 que nos guía hacia la derecha por un carretil asfaltado y decidimos seguir con el coche hasta que se convierte en pista de tierra. Aparcamos y nos ponemos las botas. 16 º y se nota que ha llovido, un aroma a flores y hierbas aromáticas nos dan la bienvenida.

Comenzamos encantados de descubrir este rincón tan impresionante de Alicante, que peña más colosal tenemos enfrente.
La senda convenientemente marcada de blanco/amarillo nos va guiando, vira a la derecha poco a poco, entre fincas tapiadas con almendros hasta introducirnos en el barranco del Fraile (o llamado de la Zarza en otros sitios). Hasta aquí no habíamos sentido sensación de calor, pero ahora entre el desnivel y que vamos cubiertos por carrascas, romeros....parece que del suelo sale fuego.
Durante el trayecto por el interior del barranco del Fraile, a pesar de la sombra,  la vegetación tan espesa nos hace sudar. 
Hasta que un brusco giro a la izquierda, por una pared con poca vegetación nos eleva rápidamente, teniendo fabulosas vistas al pueblo de Algueña y todos los montes que la rodean.
En poco tiempo llegamos a un alto, con un montón de piedras desde donde disfrutamos del paisaje, divisamos el valle que se extiende por la cara sur de la sierra de Algayat.  Al fondo las brumas impiden ver el mar.

Siguiendo el poste indicador pasamos por el collado de la Herrada y un último empujón para llegar a la Peña Gorda o Penya Grossa, de 1.083 metros de altitud.
Una vez en la cima tenemos una vista panorámica irrepetible, ya que podemos observar: la sierra de Crevillente, el Cantón de Abanilla, la Sierra de la Cruz, el Monte Coto, El Cerro de la Sal, la Sierra de la Espada, la sierra de Quibas y de la Pila, el Carche, la sierra de Salinas.... Y muy cercanos a nosotros, en la cara norte tenemos la sierra del Reclot, con la fea cantera marmolera a su izquierda, desde donde parten ruidos de máquinas trabajando.

Un merecido trago de agua y nos dirigimos a atravesar el cordal de la sierra que transcurre casi todo por terreno lapiaz. Desde aquí parece una crestera sencilla, pero de eso nada. 
Abandonamos el PR, pero el sendero está señalizado con estratégicos mojones de piedra. El primer tramo es en descenso. Conforme nos alejamos la Peña Gorda va haciéndose más merecedora del nombre, se ve enorme.
El obstáculo que se pasa por la derecha.
Van viéndose grandes farallones pétreos que conforman la cota máxima de la sierra. Pasamos al lado de una oquedad, mira que hay una cueva. Más adelante se queda pequeña en comparación con la que estabamos pisando.

El primer obstáculo del día hay que salvarlo por la derecha. Hay una peña delante que no parece fácil pasar y nos desviamos siguiendo los cairns colocados estratégicamente. La ruta baja bastante para rodear la gran peña en que se ha convertido la que parecía pequeña dificultad del día y luego por el lateral pasar despacio, por que apenas queda una senda tallada en piedra. Conseguido, ya nos hemos situado al final del primer peñón que compone la cordillera y que es el único paso más dificultoso de la ruta. 
Mirada hacia adelante.

Adelante por una senda muy facil, vamos mirando a ambos lados si existe algún camino alternativo de bajada, pero no encontramos hitos que nos lo indiquen. Nos extraña porque ahora las lomas que tenemos a ambos lados, en algunos tramos son solo de matorral bajo.


Mirada hacia atrás.
Continuamos caminando entre pequeñas subidas y bajadas con la vista puesta en la otra gran mole, la Peña la Mina, que es el siguiente objetivo. Pasamos al lado de unas pequeñas carrascas en el lado izquierdo del monte que tienen las hojas completamente marrones, espero que con las tormentas de los últimos días consigan sobrevivir. Que pena, que año mas devastador para los pobres arboles y plantas.

Comenzamos a subir bastante bruscamente lo que creemos por un momento que es la peña última de la sierra del Algayat, pero cuando estamos "coronando" vemos que estamos en la penúltima. Venga un último esfuerzo. Que merece la pena.

Entre algún pequeño pino y vegetación rastrera seguimos la senda difusa que sube hacia la cima.
Nos encaramamos al alto, a la cumbre de la Mina pero nos ha ganado un grupo de piratas, o por lo menos uno.
Las vistas son gratificantes. Vemos toda la crestera recorrida, era una idea que teníamos hace tiempo y cumplirla es toda una satisfacción.

Una parada para hacer fotos y tomar un piscolabis para recuperar fuerzas.  
Desde aquí no parece una crestera tan fiera, pero los continuos subes y bajas y el último gran peñón a cada lado hace que esta ruta la haya calificado de nivel medio-alto.
Reemprendemos el camino, tomando el PR CV 399, que baja hasta La Romana. Paramos un momento a visitar el Belén navideño, buena idea tenerlo puesto todo el año, así no da trabajo. 
La temperatura es algo más cálida, y comenzamos con cuidado el brusco descenso. Este itinerario es conocido por nosotros, hemos subido varias veces. Así que al lado del acantilado vamos avanzando hasta llegar al Collado de la Cava o de las Mulas donde está el poste indicador. 
Rectos comenzaríamos a recorrer la Sierra de la Cava y podríamos bajar a la Canalosa, hacia la derecha.
Nosotros giramos a la izquierda. La Peña de la Mina emerge como si un galeón gigante hubiera varado en esta sierra. Es la cara pedregosa de la cima. 







A la derecha divisamos el pueblo de la Romana y al fondo, a la derecha, la sierra de la Zafra, de Cámara y la Cabrera, con su característica silueta. Al lado izquierdo la sierra de Salinas. 
La senda va en dirección izquierda, lo cual nos viene bien en nuestra ruta de regreso a Algueña, en algunos momentos casi pegados a las paredes rocosas.

Atravesamos pedreras con muchas carrascas, romeros bastante secos y descendemos hasta unos troncos de almendros secos del todo, que todavía tienen su utilidad como postes indicadores con marcas blanca/amarilla. 
Llegamos a las primeras tapias de piedra, ya sin arboles frutales y el PR se dirige a la derecha, hacia La Romana. 
Desechamos ese cruce y nos dirigimos a la izquierda, siguiendo los rastros de un cairn. 
El cordal recorrido hasta la Peña Gorda.
Sigue habiendo hitos que nos conducen por la falda de la montaña hasta un cartel que señala la reserva de flora de la Ombría de Algayat. 
Contemplamos las paredes de la Mina y el cordal hasta la Peña Gorda que hemos recorrido. 
Continuamos rectos por una preciosa senda. 
Y desviándonos un poco a la derecha llegamos a un parque recreativo, con ruedas de molino, un sillón de piedra enorme, un pozo, una fuente, hasta farolillos, atravesamos el precioso rincón pero vemos que el camino conduce demasiado abajo, hacia la carretera y queremos intentar ir pegados a la sierra. 
Rehacemos el camino y seguimos por uno que sube. Pero enseguida se acaba y comienza la búsqueda del sendero. 
Primero vamos por medio de un bancal de almendros, después nos internamos por una pinada, bastante enmarañada.


Volvemos a tropezar con un hito enmedio del bosque de pinos, y lo seguimos. Caminos y fincas de almendros, olivos, nogales, avellanas, higueras... se suceden. Vamos un tramo con hitos, pero al dar una curva que parece que se va demasiado abajo decidimos continuar por medio de bancales. Sin perder de vista los caminos que nos parece que pueden llevar a rodear la sierra.
Cuando retomamos de nuevo un camino enseguida desaparece en mitad de un bancal de almendros, olivos.... lo tienen todo muy cuidado, recién labrado, lo cual dificulta nuestro avance. Nos hundimos en la tierra esponjosa.

Nos acercamos a un rincón donde a la izquierda hay varias casas/cueva, pero nosotros continuamos de frente por bancales. 
Van desapareciendo los cultivos y vamos acercándonos a un bosque de pinos. Se ve la Peña del Altar y una vez rodeada esta en la siguiente peña existe una cantera. Pensamos que debe existir un camino para poder acceder con las máquinas pero no existe, no se como habrán podido llegar hasta allí. 
Cruzamos el  Barranc Fort y ya por medio de la pinada continuamos nuestra ruta, sin marcas ni caminos, nuestra intuición y el GPS dicen que queda poco para llegar hasta el coche. .
Caminamos por terrazas de piedra que se conservan en bastante buen estado, recordándonos un pasado cercano donde se aprovechaba el terreno hasta casi las cumbres. Comenzamos a ver el pueblo de Algueña. Ya estamos más cerca. 

La vegetación nos obliga a subir y bajar en algunas ocasiones para poder avanzar y por fin llegamos a una zona donde va desapareciendo el arbolado y nos es más fácil caminar.  
Nos tropezamos con una pequeña cantera. Y a su lado unas señales blanca/amarilla/verde. Es otra ruta alternativa de subida o bajada a la Peña Gorda, por encima de la loma con vistas al Barranco Fort.

Continuamos ya más animados para atravesar el último barranco, un pequeño sendero nos vuelve a conducir hasta unos campos de almendros. Vamos rectos para llegar al carretil asfaltado y hemos salido bien al PR CV 339, a 20 metros tenemos el  coche.
Ha sido un precioso itinerario muy montañero, desconocido casi en su totalidad para nosotros. La vuelta ha sido un poco complicada, igual es más fácil bajar hasta la carretera de La Romana-Algueña y caminar cerca de ella, se avanzará más deprisa. Pero no tiene perdida a media altura se da la vuelta completa a la sierra de Algayat y cruzar los barrancos no tienen dificultad.
Sierra de la Cava y a continuación Sierra de Algayat. Cara noreste.



miércoles, 11 de junio de 2014

CABRERA (873 m.) y PEÑA DE LA MONEDA

INTEGRAL POR  LA SIERRA CABRERA-


FICHA TÉCNICA-
Día: 11/06/2014
Participantes: Julián y Lourdes.
Tiempo estimado: 4 horas.
Distancia: 13 km.
Dificultad: Media.
PR CV 159.  Ruta 6.
Como llegar:
Desde Sax, a 5 km,  atravesar el pueblo dirección a Salinas.( Desde Salinas dirección a Sax, a 3 km).
Por la CV 830,  km. 12,4, hay un pequeño cruce a la derecha. Ahí se toma dirección a la izquierda, circulamos  aproximadamente 1,5 km. dejando a la derecha una casa con una pequeña valla, continuamos y enseguida llegamos a un enorme caserón a la izquierda. Debajo de los pinos se puede dejar el coche, a la vuelta lo agradeceremos. Es Casa Soler, en la partida de las Beatas de Salinas.
Wikiloc: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=7061267

ITINERARIO:
Casas de Soler - Barranco de Rivell -Faldas de Cabrera - Cima de Cabrera - Camino de Tramasierras - Torre eléctrica - Cueva - Collado de la Moneda - Barranco de Salinas - Villa Podencos - Finca Anna Fons - Finca Cabreras 12 - Lomas de Cabrera - Casas de Soler.

La Sierra de Cabrera, con su cima y el Peñón de la Moneda, situada al noroeste de la provincia de Alicante, en la comarca del Alto Vinalopó. Se encuentra en una importante encrucijada de caminos entre las comunidades valenciana,murciana y castellano-manchega. Ubicada entre las poblaciones de Sax (a cuyo término municipal pertenece la mitad oriental, Salinas (a la que corresponde la parte Sur-Occidental de la sierra); la porción restante queda dentro del término de Villena.

Los picachos de Cabrera son una formación aislada de la cima principal y bastante abrupta de pináculos de piedra que dan al paraje una aspecto agreste y unas vistas espectaculares.
Se trata de una sierra con poco desnivel, pero con unas interesantes paredes rocosas muy aptas para la práctica de la escalada.


RUTA:

Debajo de unos enormes pinos, al lado del caserón aparcamos y comprobamos que el día está bastante agradable para andar. Sopla un poco el viento y salimos rectos, cruzando el carretil que traíamos. Con la visión de la Cabrera al frente.
Iniciamos la marcha por un camino de tierra con dirección norte remontando el barranco de Rivell. 
Hay una primera intersección a la derecha que desechamos, y al llegar a la segunda continuamos por la pista principal. Sobrepasando una casa en ruinas y unos almendros en bastante mal estado, la sequía está haciendo estragos. 
Un poco más adelante encontramos una bifurcación, tomamos el ramal derecho. 
Muy pronto el camino hace un brusco giro a la derecha y baja para vadear al lecho del barranco para de nuevo ascender. El desnivel es constante pero fácilmente superable hasta que, tras superar un tramo con piedra suelta, se llega a un punto donde la pista de tierra desaparece y se transforma en un pequeño sendero. Comienza lo empinado de la ruta de hoy.

Hay hitos y algún punto verde de pintura para indicar que se inicia la subida a la Cabrera. 
Seguimos por la estrecha senda ascendente, tomamos como referencia el pequeño peñasco blanquecino del frente para superarlo por el lado izquierdo con senda marcada con cairns. 
Una vez superado el peñasco los hitos desaparecen y nosotros continuamos un rato campo a través primero hacia la izquierda, al ver unas trazas de sendero, pero después giramos hacia la derecha y retomamos el buen sendero.
La peña que sale en la foto es la que hay que rodear por la izquierda y una vez remontada situarse encima de ella. Para continuar un tramo rectos y enseguida volvemos a ver un cairn de piedras.





El resto del  itinerario está muy bien señalizado con hitos de piedras y mirando hacia el gran mascarón de proa, a nuestra izquierda, vemos el vértice geodésico. No tiene perdida, en esta dirección caminamos. 
Nos colocamos en poco rato a los pies de la crestería de la Cabrera y siguiendo los marcas avanzamos por debajo de las peñas, un sendero sencillo en cuanto a dificultad técnica y desnivel.
Ya casi tenemos al alcance de la mano el vértice geodésico de la Cumbre de la Cabrera.


Por esta senda debajo de las rocas nos encaramamos a un collado situado entre la crestera y la cima de la sierra. Desde aquí primero avanzamos por unas pequeñas losas de roca y después por un sendero que vira a la izquierda en dirección al hito. 
Maravilloso, es un punto de visión diferente, la Cabrera con sus puntiagudos picachos la habíamos visto tantas veces desde la autovía, y también desde Salinas.



Desde la cumbre la panorámica es muy amplia, divisando la sierra de Salinas, el Carche a su espalda, la sierra de Cámara, la de l'Ombria, la Zafra, la inconfundible silla del Cid, la sierra del Maigmó, de la Argüeña y todas las sierras entre Elda y Bañeres, alcanzando a ver a sus espaldas la Mariola. 
Una parada para almorzar y contemplar embelesados el paisaje con los picachos de la Peña de la Moneda a nuestros pies. 
Reemprendemos el camino que desde el vértice geodésico parte con dirección Norte, para descender por un tramo de pronunciado desnivel y piedra suelta hacia el barranco de Salinas y la Peña de la Moneda. Quedan restos de pintura blanca/amarilla y nos sirven para saber mejor el itinerario, pero está muy pisado, es una cima muy visitada.
Esta senda discurre entre bosque de pinos, hay que poner mucha atención porque la bajada es con piedra pequeña y resbaladiza, y después de un rato desemboca en un pequeño rellano.
Llegamos a una bifurcación(1), a la izquierda haríamos la vuelta más directa, bajando por el barranco de Salinas. Pero hemos leído que se puede subir a la Peña de la Moneda o picachos y nos dirigimos a la derecha. 
Este sendero nos  permite visualizar desde abajo las paredes del noreste de la crestería de la Cabrera por la que antes hemos transitado. Hay varios pináculos de piedra que recuerdan els frares de la Serrella, un poco más redondeados. Vemos que en las paredes hay clavos para escalar.
Esta senda nos saca al camino de Tramasierras, en donde giramos a la izquierda. No sin antes echar un vistazo hacia atrás, hemos bajado por una senda entre la cima de la Cabrera y los Picachos y ahora estamos enmedio de ambos.
La Cabrera desde el este es una mole rocosa, y los picachos parecen desde aquí pequeños rocas puntiagudas


Avanzamos por la pista de tierra, flanqueada de pinos y con alguna casita de campo con almendros. Tras cruzar bajo un enorme poste de tendido eléctrico encontramos una bifurcación.
Tomamos el ramal izquierdo que hace una pequeña bajada, y enseguida hay un enlace, giramos a la izquierda con dirección hacia las agujas de la Peña de la Moneda. Desde este punto tenemos una visión de toda la extensión este de la sierra de la Cabrera.
Y debajo de los picachos se ve perfectamente la serpenteante senda que debemos ascender si queremos coronar el collado de la Peña de  la Moneda. 


A pocos metros nace por la izquierda una senda muy pisada que es por donde subimos hasta la base de la Peña y concretamente hacia la cavidad ente dos agujas, enmedio de las cuales hay una pequeña cueva y pequeñas hendiduras en lo alto de ellas donde se refugian muchas aves que no paran de piar ante nuestra presencia. 

















En esta zona también hay clavos para la escalada. Desde su boca observamos al fondo la sierra del Cid, de la Argüeña, del Frare y más cerca el castillo de Sax.             Nos detenemos un momento a contemplar el rincón y enseguida iniciamos un tramo de monte a través, primero nos dirigimos por la cara norte de la sierra, rozando las peñas, hacia el oeste.

Cuando en lugar de rocas hay una pequeña loma con gran desnivel,  utilizando torrenteras y pasos de animales, ascendemos por medio de la pendiente hasta un collado que se abre sorprendentemente entre las dos jorobas más grandes de los picachos de la Cabrera. Nos encanta descubrir estos pequeños secretos que guardan las sierras en sus entrañas, veredas que se usaban antiguamente y que  no esperabamos encontrar.
Desde el collado descendemos por la vertiente contraria al Barranco de Salinas. Viramos unos metros a la derecha para atacar la bajada entre la densa vegetación y alguna pedrera. Ahora la referencia que tenemos es una casa que hay al fondo, ya que no hay senda definida. Y enfrente tenemos todo el trayecto el Peñón del Rey.
Imagen desde el barranco Salinas. El paso es entre las dos peñas.

Hasta salir al camino ancho de tierra que baja desde el cruce que antes desechamos(1), es el barranco de Salinas.


Tomamos el camino girando a la derecha, marchamos por una tupida pinada que nos hace la ruta más liviana y fresca. 
Vamos a rodear la sierra, pero tenemos unas vallas en las fincas y no sabemos si por la orilla de la montaña hay senda, así que seguimos las indicaciones del GPS que se separa un poco de la sierra y usando caminos usados por los vecinos de las casitas de campo vamos girando en sentido contrario a las agujas del reloj.
 





Enseguida viramos a la izquierda llegando junto a una finca que pone Villa Podencos. Desde aquí seguimos por un camino asfaltado en donde doblamos a la izquierda y lo seguimos un rato de frente bordeando el Peñón del Rey entre varias casas de campo, con dirección oeste, sobrepasamos la finca de Anna Fons, y llegamos hasta un cruce de caminos donde debemos girar bruscamente a la izquierda. 
Proseguimos ahora subiendo un poco y sobrepasando una casa donde están de obras, están acabando varios muros de piedra, en su puerta pone Cabreras 12. 
Dejamos el asfalto y giramos a la izquierda iniciando un suave ascenso. Este camino termina en un campo de cultivo que cruzamos por medio por que está labrado y continuamos rectos pasando pequeños barrancos, entre una pequeña pinada, desembocando  en un camino de tierra que cruzamos para seguir otra senda que baja a sortear la rambla y continúa hasta otro campo de cultivo que también bordeamos por la derecha. Una pequeña senda sigue al encuentro de un nuevo campo de cultivo junto a un camino a la altura del Barranco la Tomasa en donde giramos a la izquierda con rumbo sur.
Bajando por el camino encontramos una bifurcación en la que tomamos el ramal izquierdo, y tras avanzar, en otro cruce seguimos por la derecha. Y ya viendo la meta al fondo atravesamos este último tramo sin senda marcada, campo a través lo más rectos posible hasta las Casas de Soler. Nos espera el coche a la sombra, que sorpresa más agradable, que fresquito. Una ruta que nos ha sorprendido muy agradablemente. Preciosa ruta, pero cuidado en verano hay que salir y volver pronto.