BENICADELL(1.105 M.) DESDE BENIATJAR

ASCENSO AL BENICADELL POR LA CARA SUR, DESCENSO POR LA NORTE

FICHA TÉCNICA-
Día: 13/11/2016
Participantes:  Jose, Isaac, Antonio y Julián .
Tiempo estimado: 6 horas y media.
Distancia: 14 km.
Dificultad: Media.
PR CV 213.
Como llegar:
Por la autovía de Alicante a Valencia que va por Alcoy. Después del puerto de Albaida hay que buscar un cruce que nos lleve al pueblo de Beniatjar.
Wikiloc: https://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=15489958

ITINERARIO:
Beniatjar - Fuente - Barranco y senda de les Fontetes - Área recreativa y fuente de Les Fontetes - Casa forestal de les Planisses - Coll de la Cova - Mirador - Canal - Collado - Collado del Benicadell - Benicadell - Higuera y pouet del Benicadell - Nevera del Benicadell - Ombría del Benicadell - Casa Peñalba - Área recreativa y fuente de Les Fontetes - Barranco y senda de les Fontetes - Beniatjar.

La Sierra de Benicadell está vinculada a la figura del Cid, ya que este legendario caballero castellano fortificó un castillo árabe existente en las alturas de esta sierra en el año 1.092. El "Cantar del Mio Cid" cita estos bellos parajes con el nombre de Peña Cadiella.
El elegante filo de su cresta cimera define la alineación de la sierra, divisoria natural entre las comarcas del Comtat y de La Vall d´Albaida y artificial frontera provincial entre Valencia y Alicante, destacando nítidamente en el paisaje con sus abruptas laderas sobre amplios valles abiertos al pie de sus vertientes, tierras agrícolas, coloristas y cautivadores paisajes humanizados dibujados por la historia del hombre sobre la tierra.

Benicadell  tiene dos vertientes muy definidas: en su cara Sur, en la solana; y en su cara Norte, la umbría, factores que diversifican los ecosistemas y le han dado por parte de la Generalitat Valenciana la merecida consideración de Paisaje Protegido.
Algunos testimonios patrimoniales de la sierra: la cova de l´Or, el más importante yacimiento del Neolítico Valenciano; la cova Negra; las pinturas rupestres del barranc de la Carbonera; torres y castillos de origen islámico; las neveras, en especial la de la cima; los caminos, abancalamientos, casas, aljibes, fuentes… La profunda huella del paso del hombre por estas tierras.

RUTA:

Comenzamos la etapa en el pueblo de Beniatjar, situado al resguardo del Benicadell, en su cara Norte.

El camino está reseco y sube suavemente hasta el área recreativa de Les Fontetes.

Desde allí por un estrecho sendero llegamos en pocos minutos a la casa forestal de Planisses, que están rehabilitando.

Ascendemos un tramo por pista hasta que la abandonamos para girar a la izquierda y enseguida debemos tomar, a la derecha, por un angosto sendero e ir rodeando la sierra, por los pies del roquedo, por su cara Este. Nos lleva hasta un mirador al que han habilitado con una barandilla.

Estamos cambiando de vertiente y ya disfrutamos de vistas al valle del Comtat, a la Safor....

Proseguimos con cuidado. Hay un suave descenso y el suelo con piedras puede resbalar, así que aumentamos nuestra atención.

Y cuando llegamos al lado de una peña vertical toca girar a la derecha y comenzar a remontar el largo repecho.

El canal no tiene ningún problema técnico, pero la exigencia en cuanto a desnivel se puede comparar con el Puig Campana o montes de Pirineos. Es vertical.

Superamos la primera canal y hacemos una parada para beber y para observar lo que hemos subido y lo que resta por superar.

A nuestra espalda todo el valle del Comtat, el embalse de Beniarrés tiene tan poca agua que apenas se ve.

Continuamos con la segunda canal. El avance es lento, en zigzags que permiten subir con más facilidad, pero es gratificante el ascenso a este gigante pétreo, con unas imágenes de abruptos riscos, afiladas crestas, una ruta muy montañera y salvaje.

Ganando altura disfrutamos de la Safor y al fondo el mar Mediterráneo.

Con unas panorámicas de 180º vemos al fondo todo el valle del Comtat, y nos rodean las sierras de la Safor, Foradada, Almudaina, Alfaro, Xortà, Serrella, Mariola......Otra parada para beber agua y disfrutar de las panorámicas del valle, del camino ascendido y de los riscos que forman la cumbre del Benicadell y adelante.

Por el filo de la cornisa, sin ninguna visión de peligro,  llegamos al collado. A la derecha está el espolón rocoso, último obstáculo para llegar al vértice geodésico.


Mientras dos se quedan preparando la mesa, otros dos nos dirigimos con cuidado a hollar la cumbre más alta del Benicadell. Hay que avanzar con cuidado usando las manos para progresar y poder sacar la foto cimera. Mucha gente intentando llegar al punto geodésico.

Regresamos por el mismo camino, la vuelta resulta más sencilla y tenemos los manjares servidos. A reponer fuerzas.
Emprendemos la marcha, esta vez hacia la cara Norte del Benicadell. Descendemos y cuando llegamos a una bifurcación la desechamos continuando rectos. Vamos a visitar el nevero. A las espaldas, el peñón del Benicadell.

La cava de la neu del Benicadell conserva su techado, no es muy ancha, pero si profunda.

Después de hacernos unas fotos para el recuerdo y de recrearnos con la buena conservación del nevero, nos decidimos a reemprender la marcha.

Volvemos sobre nuestros pasos un pequeño trecho y cuando vemos el poste indicativo del PR CV 213, giramos a la izquierda para emprender el descenso por la cara Norte del Benicadell.

En pocos minutos nos descabalgamos de la sierra y enlazamos con una pista de tierra. A la izquierda. Al echar al vista atrás se aprecia mejor el desnivel y esfuerzo que hemos hecho en la jornada de hoy.

Siguiendo las señales del PR CV 213 hacemos un cruce a la derecha que nos conduce por un angosto sendero hacia la Casa Peñalba. Una parada para disfrutar de ella, a pesar de encontrarse en ruinas tiene una gran presencia.

Continuamos nuestro itinerario llegando de nuevo al área recreativa de les Fontetes, una obligatoria parada para beber agua.

Y desde ahí, en suave descenso, retornamos hasta el pueblo de Beniatjar.

Bonita y exigente ruta al Benicadell. Si queremos ir a Pirineos no podemos hacer menos.

Imprescindible una parada para tomar una cerveza en el pueblo de Carrícola. Se respira arte por los cuatro costados. Visitar todas sus esculturas de hierro y subir al castillo es una excursión apta para todos los públicos y te permite conocer la pasión que tienen en Carrícola por el arte y el buen gusto.