Machado

"Caminante, son tus huellas el camino y nada más; Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace el camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Caminante no hay camino sino estelas en la mar". Machado.

miércoles, 9 de mayo de 2018

LA GRANA (1.095 m.)

SIERRA DE LA GRANA: MIRADOR A AITANA, PENYÓ DIVÍ, PUIG CAMPANA, CABEÇO D'OR...


FICHA TÉCNICA-
Día: 9/05/2018
Participantes: Julián y Lourdes.
Tiempo estimado: 3 horas.
Distancia: 11 km.
Desnivel: 406↑↓
Senderos: Camino de Santiago del Sureste y GR 330
Dificultad: Media-Baja. Es una ruta sencilla técnicamente, corta y apta para todos los públicos.
Como llegar: Por la autovía de Alicante a Valencia, en dirección a Xixona. Sin entrar buscar la rotonda que nos desvía a la derecha a Torremanzanas. En la entrada del pueblo hay un desvío hacia la CV  hacia Relleu, entre los kilómetros 9 y 10 está el Port El Collao.
ITINERARIO: 
Torremanzanas/Port El Collao y Mas del Collao/Km. 9 y 10 - Camino de Santiago del Sureste - Mas de la Surca - Font de la Beura, lavadero y depósito - Mas del Nofre - GR 330 - Corral de Romia, en ruinas - Grana - Corral en ruinas - Racó de Cortés - GR 330 - Mas Cortés de Dalt - Port El Collao y Mas del Collao.


























RUTA:
Aparcamos a un lado de la CV 782, al lado del Port El Collao.


























En el primer cruce nos dirigimos a la izquierda, para llegar en pocos metros a un collado.


























También a la izquierda, para en pocos metros tomar por la derecha. Abandonamos poco a poco el bosque de pinos para caminar por sendero rural, flanqueados de verdes almendros. Al fondo surge el Puig Campana.


Vamos paseando por un sinuoso camino que nos lleva a la puerta del Mas de la Surda, hay tres perros ladrando pero nos desviamos hacia abajo y callan.


























Encontramos a los lados del camino preciosas carrascas en flor que nos regalan imágenes como ésta.
























Este nos va introduciendo en una vaguada, el barranc de la Surda, entre la Sierra Carbonera, a nuestra izquierda, y la Sierra de la Grana, a la derecha.

Llegando a atravesar la rambla, dentro de la cual hay una fuente, un lavadero y un depósito, todo seco y entre matorrales. Pero lo que más nos llama la atención es el tamaño de la carrasca que crece en el ribazo.


























Proseguimos hallando en un lateral un durillo en flor, nos llama la atención porque no crecen habitualmente en las montañas alicantinas, necesitan humedad. En pocos metros llegamos al Mas del Nofre. Aquí abandonamos el Camino de Santiago del Sureste (no está muy señalizado, hemos visto un par de rayas amarillas) que sigue por el lateral de la casa.








Nosotros hacemos un giro brusco a la derecha, no sin antes ver hacia el Norte una ermita, creemos que pertenece al Mas de Montoro.
























El paisaje se abre a la izquierda, en contadas ocasiones por la densidad de la vegetación, para disfrutar de las vistas de la sierra del Aguilar, de la Real, Puig Campana, Ponoig, Cabal, Penyó Diví... hoy están difusos por las nieblas.

























Enfilamos por el camino de tierra pero no podemos dejar de detenernos y observar los abancalamientos, su altura, y hasta qué nivel de la sierra suben.











En este momento vemos el Penyó Diví, la Peña de Sella... en el centro de la imagen.
Continuamos la ruta parando en un gran ejemplar de madroño que hay en un lateral.













Ahora podemos divisar Aitana, Peñón Divino, Peña de Sella, Sanxet, Cabal...


























Y un último mirador al Noreste, con las cumbres más altas de Alicante alineadas, para nosotros es un punto de vista inédito. Espectacular.


Llegamos a un collado, en él hay una pequeña balsa y un sembrado, creemos que será para la caza. 


























Y al cambiar de vertiente surge cortando el horizonte el Cabeço d'Or, en toda su longitud.

























El día se está encapotando muy rapidamente y comienza a llover.












Apenas son cuatro gotas pero nos ponemos los chubasqueros, con el calor que hace.
La nube negra amenaza al Cabeço d'Or.
























Por una senda enlazamos en el GR 330, a la derecha. Pasamos al lado del Corral Romia en ruinas, enseguida desechamos un ramal que por la derecha baja por la cara Norte de la Grana(GR). Nosotros continuamos rectos, apenas unos metros para desviarnos a la derecha, en un campo a través en mitad de la maleza, espinos, para llegar al vértice geodésico.












La Grana con sus 1.095 está tapada por la maleza. El incendio de hace unos diez años debió ser sobre todo en el alto y hay pocos arbolado, pero mucho espino. En compensación crece alguna bonita flor en su cumbre.








Queremos bajar casi rectos a buscar la senda, pero está tan tapada que decidimos regresar por el mismo campo a través. Retomamos la senda, hacia la derecha.

Se intercalan zonas con vegetación baja, y otras con grandes pinadas. Queda una casa en ruinas y antiguas tapias de piedra seca.
Llegamos a un gran cruce, giro brusco a la derecha. Como nos temíamos al cambiar de vertiente, a la Norte, el cielo está más oscuro, amenazando lluvia.
Yendo hacia el Racó de Cortés comienza a caer una tormenta con agua y algún granizo. Vuelta a poner los chubasqueros.

Pasamos con prisa por el Racó de Cortés, una cortina de agua cae en este momento.
Y llegamos al Mas Cortés de Dalt, hermosa masía en la que nos refugiamos unos minutos. Viendo que ha parado proseguimos.
Corren regajos de agua y han quedado charcos en el camino. Paramos a observar el enorme chopo que crece en el lateral de la casa de campo.

























Un último vistazo a la cara Norte de la Grana, se ve salir vapor tras la caída del agua sobre la tierra que en mayo ya está a altas temperaturas. 

























Caminamos viendo los efectos beneficiosos de la lluvia, grandes charcas de agua, campos regados, las plantas con un tono más verde...











Y llegamos al coche minutos antes de que caiga otra tormenta. Nos cambiamos de ropa y ya secos comentamos que en Alicante mojarse en mayo es casi una bendición. Porque no hace frío, con una ruta tan sencilla y llevando ropa de repuesto no es ningún problema un poco de lluvia. 

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